Callaway Golf ha demandado a Acushnet (consorcio propietario de Titleist entre otras marcas) por utilizar cuatro o más patentes registradas en la fabricación de la bola ProV1 y obtener, de esta manera, unas ventas de 1.000 millones de dólares. Estas patentes fueron adquiridas por Callaway cuando adquirió Top Flite en 2003.
Aparentemente, Callaway ha estado intentando llegar a un acuerdo con Acushnet repetidamente, según las palabras de su portavoz, Larry Dorman, pero desde Acushnet sólo se ha comunicado que se defenderá “vigorosamente” el caso.
No ha trascendido la cantidad demandada, pero se estima que puede estar en torno a los 150 millones de dólares.
Vía | Golf Punk Online
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